La última encuesta de Radar viene a confirmar una cosa, Sartori no es un problema para Larrañaga, supo serlo, pero ahora es un problema de Lacalle Pou.
Si en las internas no hay un candidato que gane superando por mas de 10 puntos porcentuales al segundo, no hay un ganador, es decir, pasa a decidirse el candidato en la convención del partido ( conformada por los nombrecitos en las listas de las internas) y esa reunión podría llegar a ser la mas pintoresca jamás vista.
Es que ni siquiera el ganador tendría asegurada su presencia en la fórmula, asi de loco es (el partido nacional), es que esos son los costos de estar a la venta.
La última encuesta lanza varias incógnitas, la primera, obviamente es cual es el techo de Sartori, la segunda es si ese “techo” supera a la Lacalle, y la tercera es, ¿ya se dió cuenta Larrañaga que proponer sacar a los militares a la calle no está rindiendo tan bien?.

Si se fijan en Octubre, cuando Sartori no había aterrizado (literalmente) en Uruguay Lacalle Pou alcanzaba el 53%, tán cómodo resultado que le alcanzaba para poner el vice que quisiera, su padre incluso.
Pero el hecho es que desde ese número al actual hay una pérdida de 15% (el doble de la intención de voto de Antía) y Sartori, se coloca a tan solo 9%, haciendo de estos días que quedan de campaña un verdadero suplicio para sus contrincantes.

El que festeja las encuestas por otra parte es el menos pensado, Antía, que ve como cada día su peso en la convención que elegirá la fórmula va aumentando, con lo que aumenta también el costo de obtener su apoyo.
Las próximas encuestas desataran pánico en las filas de muchos comandos, excepto el de Sartori que hasta ahora viene teniendo la vida política ideal.