El cambio llegó, los elementos fascistas de la sociedad, amparados en los discursos de odio del propio gobierno, van encontrando el camino para correr la barrera de lo aceptable, incurriendo esta vez en un intento de homicidio a un militante que estaba colgando columneras en Salto.

Mientras algunos inconscientes juegan a las fotos con el Presidente y desdibujan con sus ansias de cámara la debacle social que está sufriendo el país, militantes, jóvenes, hombres y mujeres de todo el Uruguay sucumben ante el miedo y los ataques de una derecha envalentonada.

El audio dónde se explica la situación por parte de un dirigente habla de una provocación previa de los agresores, que no fue respondida, minutos después, dos hombres arriban al lugar donde se encontraban los militantes colocando columneras y pasacalles y acuchillan a dos militantes además de quebrar el tabique de una mujer con un termo.