Meghan Markle y el príncipe Harry acaban de convertirse en padres por segunda vez y anunciaron emocionados el nombre que han elegido para su hija. La pequeña se llama Lilibet Diana, en honor al nombre de su abuela y bisabuela.

Lilibet es el apodo cariñoso que le dieron a Isabel II, la abuela de Harry. Por otra parte, Diana es un hermoso tributo a la madre del príncipe, Lady Di. Sin embargo no a todo el mundo le gusta el nombre de la bebé y así lo han hecho público en redes sociales.

El problema de este asunto es que, una cosa es comentar que el nombre es o no de tu agrado y otra muy distinta es publicar unos tweets con bromas racistas y, en consecuencia, ofensivas al respecto.

Este es el caso de una abogada, Joanna Toch, que acaba de ser suspendida por su empresa a raíz del revuelo que sus opiniones fuera de lugar han causado en Twitter. No ha tenido mejor idea que burlarse de los “nombres negros” y del movimiento global antirracista ‘Black Lives Matter’.

Joanna es abogada de derecho de familia en el bufete de abogados Family Law Café Limited, que la acaba de suspender a la espera de llevar a cabo una investigación interna para esclarecer el verdadero peso de sus opiniones en Twitter.

La empresa ya ha dicho públicamente que: “considera esos comentarios ofensivos, inaceptables y altamente contradictorios con la política inclusiva en la que cree la empresa y con lo que siempre ha trabajado y seguirá trabajando con miembros de todas las comunidades en la gestión de desafíos de las disputas matrimoniales y familiares.”

La polémica se ha generado a raíz de un primer tweet ya eliminado que ha lanzado la periodista del The Telegraph, Julie Burchill. Ella escribió irónicamente sobre el nombre de Lilibet: “Qué oportunidad perdida. ¡Podrían haberla llamado Georgina Floydina!”.

Esta broma de mal gusto hace referencia a George Floyd, el hombre negro asesinado por la policía norteamericana. En respuesta a ese tweet, la abogada respondió: “¿No importan las vidas de los negros?”.
Anna Sanchez. Yahoo