Alrededor de 2.000 efectivos han partido en aviones de transporte militar desde una base en Carolina del Norte, informa CBS.

Esto se da en el marco de negociaciones con Rusia, en una escalada de tensión generada por Estados Unidos, en busca de que en pleno invierno europeo el continente le compre gas licuado a los EEUU en vez de importar de Rusia, a pesar de que los precios norteamericanos son tres veces más caros.

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