Primera gran sorpresa en el Mundial de Catar, Arabia Saudita hizo un partidazo y Argentina careció de la habilidad para desenredar el nudo de marca saudí.
Lionel Messi, en un penal polémico pitado vía VAR, abrió la cuenta. Al Sheri y Al Dawsari revirtieron el trámite en el complemento.
A los 7′ apareció el VAR en acción, con una decisión polémica tras un agarrón en el área sobre Leandro Paredes, que se dejó caer y que Messi facturó para comenzar a ganar el partido.
El segundo tiempo mostró una baja en el rendimiento argentino, que está siendo criticado en argentina como muestra de que el equipo “sobró” al rival, y un correspondiente crecimiento árabe que cuando atacó a una defensa endeble se fue con oro del arco rival.
A los 48′ llegó el empate, cuando Khalid Saleh Al Sheri le ganó en velocidad a un defensa y definió cruzado para colocar el 1-1 en el trámite.
Algunos instantes después, apareció el segundo para revertir el score. Y fue con un golazo.
El pitazo final del partido fue el inicial de las críticas de un Argentina que sigue sin aprender a encarar las competiciones con la humildad necesaria.